(Créditos de una película en 1979, Así entraba Alicante en la década de los 80)
Una de las grandes cualidades de ASI NO FEM RES es su trasversalidad generacional. Lo que enriquece la barraca considerablemente. Podemos ver diferencias de hasta tres décadas entre nuestros barraquers y esto nos dio la idea de jugar con nuestra ciudad y nuestra diferencia de edad. Vivimos en la misma ciudad, pero también hemos vivido en distintas Alicantes y esto es lo que hemos querido reflejar este año en nuestra portada.
El Alicante actual y el de los ochenta es y no es la misma ciudad a la vez. El trazado aún siendo parecido ha cambiado, la ciudad ha ensanchado mucho, los accesos, etc… Sobre todo había muchos edificios que no hemos sabido conservar. La lista sería muy extensa. Pero Alicante también han sido sus comercios, algunos están en el ADN de nuestra ciudad. Por ejemplo, Galerías Preciados fue el estandarte del comercio en la terreta durante generaciones. Pero en el Alicante de los 80 aún no habían llegado los todopoderosos centros comerciales, ni el Corte Inglés. Los comercios de a pie eran instituciones en sus áreas; Como La confitería Seguí en Castaños, La Librería Internacional o la papelería Marimón en la Rambla-Altamira donde trabajaba mi suegro. La cafetería Colón junto al locutorio de telefónica (también desaparecido) en la Avenida de la Constitución. Galerías Castaños en su totalidad, Juguetes Rico. ¿Quién no recuerda comprarse alguna prenda en Julio el Madrileño? O en el Porvenir… o en Saldos Arias… O unos zapatos en Santi Show.
También recordamos todos el Banco de Alicante con sus escaleras en Alfonso el sabio. Los cochecitos que había en el parque de Canalejas… Y muchísimos bares, pubs y restaurantes. Tuve la suerte de conocer poco antes de su cierre el templo que fue Las Garrafas, en la calle Mayor. El famoso Play Boy, El Pub Amstrong o el Forat, referente del ambiente en la ciudad. Los restaurantes La Goleta Y El Delfín en la Explanada. Pero sobretodo Il Paradiso. Una discoteca que marcó toda una época. Ubicada cerca del MiniGolf, que también recuerdo con mucho cariño.
Pero quizás lo que recuerdo con más nostalgia sean los cines desaparecidos; el Arcadia, el Ideal, el Carlos III o el Monumental y otros de los que no tengo recuerdo como el Avenida, el Alameda o el Chapí.
Claro está que fueron muchos más los comercios que marcaron la época y seguro que mientras leéis esto los iréis recordando. Estos son solo algunos de ellos. Y este año hemos querido hacerles un pequeño homenaje en ASI NO FEM RES. Un homenaje a los comercios y los edificios desaparecidos. En otras palabras… Hemos querido hacer un guiño al Alicante de lorochenta!!!
Lo primero que hicimos fue buscar una persona que pudiera trasladar nuestra idea a la madera, el corcho y la pintura. Que pudiera entendernos y que le diera vida a nuestra idea.
Pensamos que ayudaría que fuera alicantino para que pudiera sintonizar con nosotros perfectamente y contactamos con Juanma Varó, un artista en el sentido más amplio de la palabra. Que se puso a trabajar para la barraca desde el primer momento. Desde aquí aprovecho para reivindicar a los jóvenes artistas alicantinos. No siempre hay que mirar a Valencia, en Alicante hay mucho talento.
Juanma en seguida nos captó la esencia de la idea, y juntos, constructor y barraca, pensamos en cómo llevar la idea al taller. Pensamos que sería interesante representar algunos edificios o comercios (ya desaparecidos) sobre un mapa de Alicante (¿el mismo de ahora??) para representar esa idea de la que hablábamos al principio. Alicante, sigue siendo la misma y es diferente, al mismo tiempo.
Después tuvimos que seleccionar unos pocos comercios y edificios significativos de los ochenta que han pasado a mejor vida. Tenía que haber de todo y debían abarcar toda la ciudad. También nos debían recordar el Alicante de la época, independientemente de la edad que tuviéramos. Los ocho presentes representan a todos los que faltan.
La comandancia de Marina fue uno de los edificios más significativos que tuvo Alicante. Con una fachada muy característica con sus arcos de medio punto y sus dos torres acabadas en cúpulas semiesféricas. Pese a estar incluido en el catálogo de Edificios Protegibles del Municipio de Alicante, la autoridad portuaria decidió su demolición en 1994. Y el puerto empezó a perder su magia desde ese día.
También hemos querido que estuviera presente Simago, los grandes almacenes ubicados en la céntrica Alfonso El Sabio. Que fue durante mucho tiempo uno de los lugares predilectos donde los alicantinos hacían sus compras. También para toda una generación fue lugar de encuentro. Un sitio donde quedar. Si bien el edificio continúa estando, su característica fachada permanece ya en el olvido… Simago también cerró sus puertas en 1994
El mercadillo de Campoamor es otra de nuestras joyas ochenteras que hemos querido representar. Si bien el mercadillo se trasladó a la Calle Teulada, su ubicación actual. En la memoria de los alicantinos está grabada a fuego la imagen de los puestos en el “descampao de Campoamor” donde estuvo situado hasta el año 2008. Hoy en día en esos terrenos está emplazado el Auditorio Provincial de Alicante ADDA.
Muchos de los alicantinos tienen un grato recuerdo de Cervezas El Neblí. Una cerveza genuinamente de la terreta. Si no me equivoco la fábrica estaba en la carretera de Madrid. Pero más que un recuerdo de la fábrica el alicantino de pro recuerda los carteles de los bares, su singular águila y la curiosa tipología medieval blanca sobre fondo azul y sobre todo las furgonetas de reparto que circulaban por nuestra ciudad. Aún existen (al menos) dos bares que mantienen el cartel de El Neblí ¿Sabes cuáles son?…
Otro de los recuerdos más arraigados de los alicantinos son las excursiones a Tabarca en el Kon Tiki. Si bien hoy siguen habiendo barcos similares, lanchas rápidas y catamaranes. Ese barco ochentero de una quilla, pienso que todos lo tenemos grabado en la retina. Alicante es mar… Y el Kon Tiki tenía que estar presente.
Representando a todos los pubs míticos de la edad de oro del Barrio Chino, como se llamaba entonces. Ahora simplemente “El Barrio”, nos acordamos de El Coscorrón. Este mítico local de dos plantas con su “artesonada” decoración aún tiene sus puertas abiertas. Es de los pocos supervivientes de los años de la Movida. Todos hemos pasado por allí en distintas décadas a tomar un mojito de esos que sirven en las teteras. Y todos también nos hemos llevado algún coscorrón al entrar.
Con mucho cariño también recordamos El Tobo. Ese precursor de lo que después fueron los parques acuáticos. El abuelito del Octopus, que nos marcó tanto que a una cierta zona del cabo de las huertas aún se la conoce aún como la zona del Tobo.
Y para el último lugar hemos dejado a la mítica discoteca Il Paradiso. Realmente fue un sitio emblemático, estandarte de toda una generación alicantina. Pero “Il Para” trascendió nuestras fronteras. Fue una de las grandes discotecas de España y porque no decirlo, un referente en toda Europa. Lo más granado del panorama musical pasó por ella, como Alaska y Pegamiodes, Loquillo y los trogloditas, Mediterráneo, Elsa Baeza, etc…
Il Paradiso va a ser nuestro emblema también estas fiestas, nuestro buque insignia. Era todo color, como lo fueron los ochenta como lo son las Hogueras, y como lo es ASI NO FEM RES. Y al igual que nuestra portada de barraca su final fue ser consumida por el fuego. Este es el mejor guiño que podíamos tener a este proyecto. La mejor manera de cerrar este círculo existente entre Alicante, los 80 y les fogueres de Sant Joan.
Foc i Salut
Chechi El Trementina
Fogueres 2017